jueves, 20 de enero de 2011

and so on (ceremonia)

No creas que ya no hay más tinieblas
tan sólo debes comprenderlas
es como la luz en primavera
es como la luz en primavera

L.A SPINETTA





lavarse los dientes con nafta
desayunar un pan de trotil
cortarse el pelo con un cuchillo
peinarse con un tenedor
quebrar el alba con un grito blanco
deforestar la mente de toda razón
llenarse la boca con hormigas:

la ceremonia ha comenzado.




sunday morning

despertarse y sentir
el aliento a dragón de komodo
trepando por la boca
la cabeza abierta como una tumba
al aire libre
tierra
tierra
tierra a ambos lados de la cama
y los cuerpos (los muertos) haciendo cola
para nacer.
fuego en las tripas
y allá, a lo lejos,
arpegios hechos con acordes menores
traen la música del soundtrack interno




la cabeza es un candelabro encendido
de ruidos, de voces
es un contínuo croar
de sapos, de ranas
es un maullar de gatos,
un suspiro de niebla,
un orgasmo de cebra



 
alienado
borracho
solo
oyendo a patti smith,
a velvet underground,
a pequeña orquesta reincidentes…

(las crines de la desesperanza
se crispan en tu boca)




…y los ojos varados, allí,
en el útero de la tormenta…




cansado de las mañanas raras
de los vecinos (tus ruidos)
del ovillo negro de la paranoia
del sol upside down
de las voces en el portaequipaje de la tarde
de los reptiles en el balcón de sus piernas
de las auroras oscuras sobre tu cara
de las visitas guiadas al desierto
de los bares entre mármoles y abstracciones etílicas
de jugar con los espejos rotos de tus mareas
de la pornografía box de 20
de brindar con baba,
esperma y flujo
con fruición




enumeraciones para un posible tatuaje

un puñado de hormigas
un galpón de silencio
un pasillo oscuro
una bodega sin aire
piedras mojadas
(secas por dentro)
un colchón roto
un ganges disimulado
un anagrama de ausencia
un útero con eco
y un par de sílabas rotas



claroscuro

tenés la boca descosida
por el humo, y el cuerpo
tendido sobre el techo

tenés los ojos descarrilados
y los brazos, son hamacas
por que sí

tenés tres lágrimas hasta abril,
y una tumba sin nombre

tenés en la cabeza un contínuo acople
hecho con e-bow, y un océano
de silencio comiéndote el rostro




un trago

un cuarto de tormenta espesa y nafta
para el hígado,
una cucharada de bosque negro sin filtrar
iluminado por el espanto,
una medida de dark pussies-aliento a morgue-cenestesia genital,
dos alas de pájaro post alucinación,
una medida de licor de necrofilia
y un shot de jugo de carne sublingual

agregar hielo o besos podridos.

beber en la banquina de la realidad
levantado el brazo izquierdo bien alto;
eructar con el reverb y los graves al mango, y
brindar por los que no están.



hoy sólo te quedás viendo la distancia que hay
entre los espejos retrovisores de los autos
que pasan por la ruta


 
entrar en la noche a toda velocidad,
hacerle el amor a la niebla
y acabar en la cara de la luna.

(para vos, que preguntábas cómo se hace para aguantar)


















diciembre, 2010/enero, 2011

martes, 11 de enero de 2011

venus fly trap*

Entonces doblé en la esquina, a la derecha. Le di al cordón como venía y subí a la vereda. Pude frenar de puro pedo, justo antes de que el paragolpes tocara el poste de luz.
Los tipos que estaban en frente, en el quiosco que venden hamburguesas, miraron sorprendidos.
Bajé del auto y cerré la puerta. Ya tenía bastante alcohol en la sangre y eso me hacía caminar despacio. Miré a los tipos del quiosco, y ellos a mí. Me di vuelta y encaré hacia la puerta.

La escalera estaba iluminada por una lamparita colgando con todos los cables hacia fuera. La cinta aisladora negra que cubría los cables estaba a punto de desprenderse. En verdad, no iluminaba mucho los escalones. Así que subí lo más cauteloso que pude. Al llegar al último escalón pude oír la música que venía desde adentro.

Golpeé la puerta y esperé. Al minuto, (o al segundo) no pude medir el tiempo, ya que mis pensamientos se mezclaban y la conciencia me empujaba hacia distintos lados de mi mente. Supuse que se estaría divirtiendo conmigo. Me enviaba hacia el pasado y al futuro de un solo cachetazo. Me apedreaba con imágenes del apocalípsis interno. ¡Hija de puta! ¡Te gusta levantarte la pollera, correrte la bombacha y mostrarme mi monstruo favorito! ¡Y sabés que me espanta como nadie! ¡Y sabés que al mismo tiempo que me alejo corriendo, voy con la cabeza dada vuelta hacia atrás, te miro, te miro, y me atraés como un imán al centro de tu demencia! ¡Y me agarrás con tus brazos-sogas y me envolvés con tu lengua carnívora y me cogés con tus mil conchas! Y yo... yo con mi única y singular pija que ya es harapos de tantas bocas y dientes que se han encargado de gastarla a fuerza de saliva y succiones espontáneas.
¡Hija de puta! ¡Hija de mil putas!

alguien abrió la puerta. Entré. Un tipo enorme me requisó con sus manos. Después, me senté en un sillón de cuero falso. La fonola ardía en cumbias edípicas y a un volúmen ensordecedor. Estaba en penumbras, el lugar apenas se iluminaba con un velador rojo en la entrada.

-pasa por acá, ahora vienen la chicas.-dijo una mujer que salió de no sé dónde-. Era una mujer grande y vestida como un ladrido de nutria.

Pasé a un cuarto a media luz. Estaba muy oscuro allí. La poca luz venía desde la calle, y desde la diminuta dicroica colgando sobre la pared.
Entonces las chicas fueron entrando de a una a la habitación. Me saludaban, decían su nombre y luego se iban mostrándome sus culos apenas cubiertos por nada.

Elegí a una. Era pequeña, y estaba cubierta de tatuajes.
Cuando la ultima de las chicas salió, entro la mujer vestida como ladrido de nutria y me preguntó cual me había gustado. Le dije el nombre de la chica.
-ok, ahora le digo que venga- dijo.
-¿me pagás?
Le di cincuenta mangos y se fue por el pasillo semi iluminado



Entonces ella entró a la habitación. Cerró la puerta, se acercó a la cama y empezó a desvestirse.
Mi mente desvariaba tanto que no entendía si todo esto era una alucinación o un sueño.

De alguna forma logré sacarme la ropa. Ella ya estaba completamente desnuda.
Se reía. Sonreía. Y hablaba. Me tiré de espaldas sobre la cama, y ella, con el forro en su boca, lo puso en mi pija y empezó a chuparla.

El cuarto giraba y las luces eran agujas para mi vista. La música desde el parlante aullaba sonidos abstractos para mi comprensión.
Ella era como el hombre ilustrado pero al revés. Sus tatuajes no anunciaban el futuro, sino que eran un mapa de su pasado. Nombres, animales, escudos y paisajes tribales de la polinesia de grand bourg se juntaban en sus piernas, en sus brazos, en su espalda.
Le puse un dedo en la concha y gritó. El tatuaje a la altura de la cintura era hipnótico.
Me quedé allí, mirándolo, como poseído. Ella seguía chupando y chupando y chupando y chupando y chupando y chupando y chupando. El vaho de goma del forro, más su aliento a incinerador de morgue le daban un perfume único al cuarto.
Las sábanas ardían en manchas de semen. Los agujeros hechos por cigarros, estaban todos juntos en la funda de la almohada. Más allá, al lado de la puerta, un cesto azul desbordaba de papel tissue y forros cargados de esperma inerte.

De repente, se subió sobre mi y empezó a moverse como impulsada por una ola de océano. Se frotaba. Pude sentir su clítoris hinchado sobre mi pelvis. Supuse que los muertos flotando en el ganges debían estar resucitando, pues la montaña de éxtasis se balanceaba sobre mí. Ella gemía y gemía y gemía y gemía.
Después de un rato, se tiró a mi lado, me miró y dijo: “¿no me notás rara?”
sonreí. Le respondí que no.
-¿ no me vez rara?- insistió.
-no.
-es que hoy es el cumpleaños de una de las chicas; estuvimos tomando…
volví a sonreír. ¡Qué mierda me importaba si tomaron o no! sólo quería terminar…

La di vueltas y la puse en doggy style. Le di duro, con fuerza, casi con maldad. Como si quisiera romperla. Le di, le di, le di, le di…

El alcohol desparramado en mi cuerpo y en mi mente no me dejaba acabar.
entonces la arrojé en la cama y me saqué el forro; ella respiraba entrecortada, cási sin aliento.
-¿me la chupás?- le dije.
-sin forro son veinte pesos más.
Me levanté como pude, busqué entre el pantalón la billetera y le di veinte pesos.
Sonrió.

Entonces se puso la pija en la boca de nuevo y chupó. Y chupó y chupó y lamió y chupó y regó de saliva y se atragantó y se la sacó e hizo arcadas, escupió saliva, se la puso de nuevo hasta el fin de su boca, y chupó y chupó y chupó y chupó y chupó y recorrió con su lengua desde la cabeza hasta los huevos y luego subió despacio hasta la cabeza, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez….

Pude ver como se le inflaban las venas del cuello cuando se ponía la pija hasta la garganta.

Sentí una marea de temblores entre los huevos y el ano y supe que estaba por acabar.
la miré y grité. Ella dejó caer sus parpados, mientras el semen se le escapada entre los labios.
Suspiré. Suspiré.

Mientras ella se cambiaba, oí desde la calle unos gritos y un par de botellas romperse.
Estaba agitado. Mi mente era un balde sin fondo. Me latía el cráneo.
Me senté en el borde de la cama y me vestí como pude. Ella se quedó parada, mirándome, con el rollo de papel tissue entre sus manos.

Eran las siete de la mañana cuando salí de allí;
el sol ya cocinaba lento el asfalto.






*adelanto de lo que en un futuro será un libro de cuentos, ensayos y relatos con el posible título de
" cyber-suburbia"

viernes, 7 de enero de 2011

la larga noche




Un paraíso de amor que viví
en el corazón del infierno…

C.Solari



parte primera
(erecciones)



ella tiene un peinado onda Keith Richards en el ´74
el teatro esta medio lleno
ahora toca una banda
hay humo
hay gente
hay alcohol

mis amigos esperan su turno
para tocar

hablamos
-vos sos medio esquizoide-dijiste-.
sonreí

hablás sobre tu vida zarpada de violencia, de…
por las noches, la ausencia hace pogo en tu pieza
pastillas
psicoterapia
internaciones
tajitos
son las constelaciones
más opacas en tu cielo
te miro
después me besás ebriamente

termina la banda de tocar, sube otra

si empiezo a desconfiar de mi suerte estoy perdido, desentona el cantante

nos besamos un rato más
pues tengo ideas cada vez menos atrevidas, insiste el tipo…

nos reímos
nos besamos
nos reímos

me olvido lo que sigue…
laguna
laguna



en la pista,/veo homosexuales y lesbianas/hay travestis y
música al mango/
una pareja toma merca a mi lado/

en el túnel/algunos se besan/otros chupan pijas/
muchos otros chupan más pijas/
chamuyo a una gorda/ está drogadísima/
me ignora/se va

en el vip/pido un trago/
una rubia baila sola/
me aburro/
ellos bailan con el torso desnudo/
tienen lentes negras/ grandes lentes negras/
aldo haydar/ hace arar a los discos en la cabina/
me aburro/
estoy a años luz de este guetto/

en la barra de la entrada/encaro a una americana/una “psico puta”
(gracias celes por el término)/
encuentro a mis amigos/
un travesti nos ofrece su boca/
le pifio al escalón y caigo/
risas/
música al mango/

salimos/

en la puerta/dos travestis me quieren punguear/
los puteo/piñas/ los corro/ botellazos/

un policía nos mira desde la vereda de enfrente/
voy hasta el auto/
mis amigos desmayados sobre el capot/

is this amerika?/is this amerika?/



la música se oye desde la vereda
al entrar en la casa
mi amigo está sentado en un sillón
con dos minas a cada lado mientras sostiene
una botella de vodka entre sus manos

la música esta al re palo
las luces colorinches se frotan contra la pared

hay gente, mucha gente

ahora bailamos
un par de minas se meten al baño
y dejan la puerta semi cerrada
se besan
se tocan las conchas
se tocan las tetas
otras minas bailan entre ellas
se meten un par de pibes entre ellas; se besan TODOS
con todos...
la euforia nos invade
nos culea
nos mete el dedo en la boca
me río como un hijo de puta
la novia de uno de los pibes esta en un rincón
con cara de orto terrible
me importa un carajo
bebo
bebo
bebo
bailamos
bailamos
la música nos hace zumbar los oídos
entra el perro de mi amigo y cruza
por el living
nadie lo ve
yo sí

una de las minas
va al baño y choca
el mueble en dónde está
la virgen del rosario
la virgen cae
y se le parten las piernas

pedacitos de piernas blancas de virgen se
desparraman por el piso
nadie se da cuenta
veo la virgen ahí
en el suelo
pidiendo auxilio
como un paralítico de yeso
con la cara de nada que tienen
las vírgenes de yeso

la levanto y la dejo en el mueble
ahí,
acostada

salen las minas del baño
acomodándose la ropa
voy a buscar a mi amigo
no lo encuentro
voy a su habitación
y lo veo
metido con medio cuerpo
debajo de la cama
-qué haces ahí?
-busco los zapatos, nos vamos a bailar

él sale con sus zapatos desde debajo de la cama y
se cae en el piso
queda tirado, inmóvil, como la virgen amputada

salgo de al habitación y no hay nadie
en el living

veo que se suben a sus coches
con los stereos al mango de cumbia
todos se ríen
gritan
gritan
gritan

se me nubla la vista
creo que me desmayo
veo borroso
no me acuerdo más
nada
nada



subo al auto.cierro la puerta
la vuelvo a abrir y vomito.
-estas bien?
-no

manejo hasta tu casa. veo triple,
triple, triple.

en tu casa, en la vereda
vomito de nuevo.
-estas bien?
-no

entramos a tu casa
encaro hacia el baño
vomito
vomito

me acostás en tu cama
zumban mis piernas
la luz me ensordece
estoy cagado de frío
me desmayo

me despierto, es de día
entrás a la habitación y te acostás
conmigo
me das la espalda
-estas bien?
-no

te toco las piernas
te toco el culo
te toco las tetas
por debajo del corpiño con arco
(quién mierda inventó esta clase de ropa?)
te toco las tetas
te toco los pezones
estás calladísima
estoy tan ebrio que no puedo ni siquiera
pensar en coger

me duermo

me despertás y me decís:
“son las dos de la tarde”

trato de cambiarme
mientras voy al baño a vomitar

te saludo,
subo al auto

paro a las diez cuadras
vomito
hace calor.
el sol me patea la cabeza
la calle se hace interminable
sigo vomitando al lado de la rueda del auto
de reojo miro a los autos que pasan
tocan bocina
los recontra puteo
no entiendo nada
todo es irreal
¡santa 197!
piedad!
piedad o
matáme acá!

de algún modo llego
a casa
me ducho
vomito

sobredosis de analgésicos
me acuesto
pierdo la conciencia
pierdo la concienci…
pierdo la concienc…
pierdo la concien…
pierdo la concie..
pierdo la conci…
pierdo la conc…
pierdo la con…
pierdo la co…
pierdo la c…
pierdo la…
pierdo l…
pierdo…
pierd…
pier…
pie…
pi…
p…

..
.




elalcoholnoscascotealagargantaybailaesquizofrénicamenteennuestrosestómagosvacíos
decomidamientraselhumoyelvolúmendelamúsicadelbarnoscaganapaloslosoidosylavista
todosbailantodoscantanmientrasmicabezahaceunpogoúnicoentreesebardo

nuestrosamigossebesanentrelosdemasvosmebailásymetéselhielodetutragodentro
demipantalónmetocásloshuevosylavergatehundoundedoahíendondesalenlasfocaslas
jirafasyhastaelsueñomásoscuroquevímidedogiradentrotuyomepedísotrotuespaciosellena
conmisdedos

nosrajamosdeahíyenelríomepajeásnoteanimásachuparmelatelamounatetagemísgemís
gemíscomouncorderoapuntodeserdegolladoteriegodebabalabocateriegodebabalastetas
tereís

teacaboenlamanotereísunsuspiroseclavaenelparabrisasdelcocheRobertSmithcanta
thekissdesdelosparlantes




Parte segunda
(Coito)




cenamos/tomo tres fernets y luego/vamos directo al sillón.

nos besamos/te saco el sweater/te toco las tetas/
me sacás la remera/

cogemos/en el pasillo/en la cama/cogemos/cogemos/cogemos

(a Nick Cave lo dejamos re- tirado en el living cantando solo)/

me mostrás tu libro de flores de bach/yo hago que lo leo/
me duermo/

en algún momento me despierto/son las nueve de la mañana/
/no estás en la cama/

entonces te veo con tu remera de racing/entrando a la habitación con el desayuno/
me río/ y pienso:/qué hijo de puta soy/ qué hijo de puta soy/qué hijo de puta soy
qué hijo de puta soy/




la luz de la lámpara refleja
una sombra en la pared
la sombra esta desnuda y bebe
del pico de una botella

besos
lenguas
el bebe
ella bebe
besos
lenguas
sombras
más sombras
besos
lenguas
lenguas
lenguas
gemidos
besos
besos
lenguas






estoy borracho, vos también/
te robo un beso/ y tu nro de tel/en el patio del boliche

volvemos adentro/
mi amigo con nuestra amiga/están en un sillon
me río, /el también/

salimos/

en diez minutos/estamos en su casa/
tomamos mates y lo vomitamos/
reímos a carcajadas/

te hago señas con las cejas/nos rajamos a lo de mi amigo
garchamos/gar-cha-mos has-ta que el sol de-rri-te el te-cho

llega mi amigo,/patea la puerta/me pide el auto
se va/

Se-gui-mos gar-chan-do/

son cási las once/nos vestimos/salimos

llega mi amigo con una mina/me río/
te pones roja de vergüenza/

subimos al auto/te llevo hasta tu casa

ya en mi casa/ me des-ma-yo en la cama


al día siguiente/ mi amigo me dice:/
“pelotudo, me dejaste solo en la casa de tu amiga/
estaba menstruando…/me chupo la verga;/le acabé en las tetas”/




Parte tercera
(orgasmo)




“qué bien que escribís”, me decís, después te metés
TODA LA PIJA en la boca mientras el vecino te espía por
la persiana, y vos, con cara de enajenada-paranoica, vas y
apenas la cerrás.
soy un esclavo, allí, entre tus discos y el ventilador de techo roto.
transpiro

la luz de la cocina ilumina el pasillo;
hay pelusas en el piso

el cuadro de Stevie Ray Vaughan enfrente de la cama me intimida;
flasheo que nos mira y se pajea
vos seguís ahí, como un pez en su anzuelo preferido
me mirás
me mirás
me mirás
tus ojos se ponen blancos

en orgasmos me revienta la carne



y los starbucks…/y los burguers…/y los sándwichs en San Telmo/
y tu perra…/

tu perra que nos miraba mientras culeábamos/
movía la cabeza de derecha a izquierda como
intentando entender/ qué mierda hacen dos cuerpos moviéndose/
sobre una cama/

pienso en cuando chupabas la pija con
cara de asco/ todavía tengo en mi mente
la imagen de tu cara de repulsión al hacerlo…/

después preguntabas/ “por qué no podes acabar?”/
ahora te estás anoticiando/












agosto, 2010/enero, 2011

martes, 4 de enero de 2011

poema de spinetta a cerati

“Dios Guardián Cristalino de guitarras

que ahora
más tristes
penden y esperan
de tus manos la palabra
Precipitándome a lo insondable
tus caricias me despiertan a la vez
en un mundo diferente al de recién…
Tu luz es muy fuerte
es iridiscente y altamente psicodélica
Te encuentro cuando el sol abre una hendija
que genera notas sobre la pared sombreada
Y suena tu música en la pantalla
sos el ángel inquieto que sobrevuela
la ciudad de la furia
Comprendemos todo
tu voz nos advierte la verdad…
Tu voz más linda que nunca”



es posta, lo encontré en internet, y salió en los diarios.

me saco el sombrero